En junio de 1571 Felipe II es informado sobre un previsible ataque a las costas del norte de España. Dicha acción bélica está formada por una armada en la que se integran Inglaterra, Francia y la zona rebelde de Flandes; en consecuencia hace un llamamiento a los diversos Corregidores del Reino, entre los que se encuentra el del Principado de Asturias D. Sancho de Tovar, instándoles a prepararse para un presumible acto de guerra con los hombres y paisanos del lugar, provistos de sus pertrechos y armas.
En la Campa de San Francisco de la villa de Avilés se realiza el «Alarde» de los hombres avecindados en la villa y lugares colindantes con las Armas y útiles disponibles. Este registro o «Alarde» realizado el 29 de junio de 1571 entre las diferentes feligresías del concejo de Castrillón, (San Miguel de Quiloño, San Juan, Naveces, San Lorenzo del Monte, Santa María del Mar, Bayas, Villa y Pillarno), nos ofrece una relación de vecinos con sus nombres y apellidos, así como de material de guerra disponible. En dicha relación y en la feligresía de Pillarno figuran entre otros:
«Bastián de Horobón dixo tenía espada e lanza»
«Juan de Orobón una espada e lanza e broquel»
«Pedro de Orobón espada e lanza e broquel»
Al año siguiente, el 11 de mayo de 1572 y en el cementerio de San Francisco de la villa de Avilés, se realiza nuevamente el registro de hombres y armas del concejo de Castrillón. Como resultado de este alarde se encuentran en esta relación:
«Juan de Orobón, espada e lanza»
«Juan González del Orobón, espada e lanza e broquel»